El jueves 02 de junio, a través del blog CITIO se dio a conocer el comunicado de profesionales y estudiantes de arquitectura que al igual que otros profesionales e intelectuales de otros rubros, han alzado sus voces y han dicho BASTA.

¿Basta a qué? Basta al miedo, a la desinformación, al olvido y a la comodidad. Parecen todos ellos (muchos de ellos amigos entrañables y mentores de este humilde modulorcho) gritar: La democracia hay que construirla todos... ladrillo por ladrillo, pero hay que planificarla y eso, como nuestro quehacer diario, es muy complejo, tedioso y a veces agotador... pero el resultado puede ser grandioso, como los resultados que obtuvieron los grandes pueblos de grandes democracias.

El clima electoral impacta en la gente... POR SUPUESTO. Y por consiguiente en la ciudad. La ciudad somos todos y los arquitectos debiéramos ser quienes manejamos este bus... este cargador frontal. Pero no. Nuestra ciudad crece de forma desmesurada y descontrolada, con muy poca participación del arquitecto (es nuestra realidad). El CAP es un ente extraño y muy ajeno a la realidad de los arquitectos. El boom inmobiliario nos alcanzó a pocos arquitectos. Nuestros últimos reductos: casas de playa y programas de decoración, hoy se encuentran agotados y nuestra profesión a nivel de Bloque Regional, realmente da lástima... no de manera individual, pues tenemos grandes arquitectos jóvenes de exportación. Pero a nivel colectivo, casi no existimos.

Es en este contexto, que un grupo de arquitectos unidos le dicen al Perú: "Para los arquitectos fue un gobierno nefasto (el de Fujimori): se eliminaron el Ministerio de la Vivienda, el Banco Hipotecario, el Banco de la Vivienda, el Instituto de la Vivienda y el dedicado a la Investigación (ININVI), así como el Instituto de Planificación; el FONAVI pasó al Ministerio de la Presidencia que malversó sus dineros, utilizados hasta en "préstamos" al Estado. Además se suprimió en la nueva Constitución el derecho a la vivienda digna."

Luego continúan: "Votaremos por Ollanta Humala. Su adhesión al Acuerdo Nacional, su juramento de respetar la democracia y su propósito de mantener el crecimiento económico pero con inclusión, es decir con un modelo reajustado que permita la participación de los más pobres en sus beneficios, por derecho, y no por ignominioso “chorreo”, nos convencen y, al mismo tiempo, nos invitan a participar, vigilantes de su cumplimiento, en corregir sus errores o en denunciar eventuales desviaciones."

Biblioteca + Mediateca Fernando del Paso - Guadalajara

Es por eso que este modulorcho, un día antes de ir a las urnas a votar, se une a este llamado y dice: La democracia no se logra comprando un boleto de la tinka. La democracia cuesta sacrificio. El resultado de una ciudad democrática -que muchos no conocemos, sobre todo los que no tuvieron la suerte de pasear por París, Florencia, Barcelona, Berlín,... o por New York, Boston, Chicago, L.A... o sin ir muy lejos, por Buenos Aires, Bogotá, Santiago o Sao Paulo- es inmenso y beneficia a todos, sobretodo a las próximas generaciones que son las que amamos.

Hablo de una ciudad democrática en donde la ciudad brinde espacios públicos y beneficios para la gente de manera gratuita sin que necesariamente tengamos que esperanzarnos en el espacio privado del Shopping Mall, el Multicine, las alamedas aterrazadas del Boulevard de Asia, los centros de convenciones de los grandes Hoteles y las guarderías, colegios, institutos y universidades privadas laicas y religiosas.

El Parque Ibirapuera en Sao Paulo alberga innumerables actividades urbanas gratuitas para ciudadanos paulistas de todas las ciudades

Una ciudad democrática ofrece parques (verdaderos parques como el parque Ibirapuera de Sao Paulo o el parque Guell de Barcelona), con esculturas, espacios para picnics para todos, con módulos deportivos, muestras de arte, actividades al aire libre, lagunas, música en vivo y mucha diversión y cultura. Una ciudad democrática ofrece centros culturales y mediatecas (como la nueva Biblioteca + Mediateca Fernando del Paso - Guadalajara o el "siempre vigente" Pompidou de París).

En resumen, una ciudad que vive en democracia ofrece EQUIPAMIENTO PÚBLICO, GRATIS... y de calidad.

Ciudadanos y turistas hacen picnics y descansan en la plaza que precede al gran museo y mediateca Pompidou en París

No es tanto la CANTIDAD, señores Fujimori. No es tanto la cantidad señor Alan García. No es asistencialismo lo que necesitamos. Necesitamos ciudades de verdad, con equipamiento serio, con infraestructura adecuada, sistemas viales alturados. Ciudades con arquitectura de verdad.

Aquí les dejo el Link Completo del post de CITIO. Disfrútenlo.

http://blog-citio.blogspot.com/2011/06/arquitectos-se-pronuncian.html